Volume 5, N. 2.
La felicidad de jugar
Si por alguna razón acude a los adultos la nostalgia de su infancia, esa razón no suele ser otra que la unión de esos dos términos que se refuerzan mutuamente: el juego y la felicidad. Ninguno de ellos es patrimonio exclusivo de la edad infantil pero es en ella cuando adquieren todo su sentido y su fuerza. ¿Qué clase de infancia sería aquella en que faltara alguno de esos dos componentes?